Gregorio Lurí, maestro de profesión, pedagogo, filósofo, vocacional investigador en materia educativa piensa que la Escuela no es un parque de atracciones porque existen maestros que te ayudan a ponerte de puntillas y ver más allá proyectándote hacia el horizonte de tu vida. La Escuela, con mayúsculas debe considerarse como una experiencia terapéutica. Uno cuando va al médico con un problema espera un diagnóstico y un tratamiento. La Escuela debe ser lo mismo, debe ayudar al niño a superar los condicionantes de su mundo familiar y social, inculcando la cultura del esfuerzo.
Estas ideas las fue desgranando Luri en la conferencia que organizada por Sociedad Civil Navarra reunión a un centenar de personas en Palacio del Condestable de Pamplona.
Para el azagrés, afincado en Barcelona uno de los problemas más importantes es la sobreprotección de los niños que se practica en muchas familias y ámbitos educativos.
Luri planteo a la audiencia los principales temas dela ctual debate pedagógico: ¿Porqué pedimos a los niños que razones sus respuestas y no consiguen razonarlas? ¿Es posible que no les enseñemos a razonar? ¿Es real la dicotomía entre memorización y comprensión? ¿ Hablar y escribir bien, serán competencias que se valoren en el futuro? ¿Es posible educar en competencias que va a requerir un futuro que desconocemos? ¿Cómo transformar el error de un alumno en una oportunidad de aprendizaje? ¿Que significa éxito escolar?

Estas y otras preguntas fue abordando Gregorio Luri a lo largo de casi dos horas de conferencia. Señaló que la investigación pedagógica demuestra que para aprender a razonar hay que aprender a escribir. Defendió las experiencias pedagógicas en las que toda actividad docente gira en torno a la gramática. “ Todos los profesores, sea cual sea su materia, deben ser también profesores de gramática.”
Una cuestión esencial , dijo, es el trabajo de la memoria. Es falsa la dicotomía entre memoria y comprensión. “No se puede reflexionar sobre conocimientos ausentes” Lo que no se guarda en la memoria nos e ha aprendido. La repetición es fundamental para trabajar la memoria, pero muchas veces el alumno considera aburrida esta repetición por lo que el docente debe ingeniárselas para evitar este problema. En este sentido Gregorio Luri reivindicó el papel del Maestro. Señaló que ningún sistema educativo es bueno si no se basa en incentivar, animar, promocionar y prestigiar la labor de los docentes. Señaló que vivimos los debates pedagógicos con una fuerte intensidad ideológica y eso no es bueno. Señaló que los cursos Tercero y Cuarto de Primaria son esenciales en la educación de un niños. Los alumnos pasan en esa edad de aprender a leer a aprender leyendo. En este tránsito se puede determinar con muchas probabilidades de acierto el éxito futuro de un alumno. Y en este tránsito juega un papel determinante la riqueza lingüística. “Aquí está el punto de fractura de nuestro sistema educativo».
Para ampliar información, pueden descargar aquí el podcast grabado por Diario de Navarra.